El diario británico denunció que EE.UU no expresó profundo repudio a la ampliación de las colonias israelíes.
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Philip Crowley, dijo ayer que Israel es un aliado estratégico de Washington y lo seguirá siendo y añadió que el compromiso con la seguridad del régimen sionista sigue siendo inquebrantable.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, indicó este lunes que continuarán las construcciones en la parte oriental de Beit Al Moqadas pese a las duras críticas a nivel mundial.
Mientras tanto el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, se niega a participar en las conversaciones indirectas con Israel propuestas por EE.UU después de que el régimen sionista haya anunciado sus planes de construir 1.600 nuevas viviendas en el este de Beit Al Moqadas.
El rechazo palestino a las conversaciones indirectas llega precedido de una serie de reacciones internacionales de condena contra Israel, entre las que se cuenta la Unión Europea.
El jefe negociador palestino, Saeb Erekat, lanzó un llamamiento al Gobierno de EE.UU para que ejerza su presión sobre Israel en su condición de aliado estratégico, pero el vicepresidente estadounidense siguió sin dar muestra de esta contundencia que le exige la Autoridad Palestina a su administración. Biden incluso destacó como positivo el compromiso de Netanyahu de que cualquier nueva construcción se retrasaría todavía varios años.
Biden, el máximo representante de la actual administración norteamericana que visitó los territorios ocupados, afirmó que con las construcciones paralizadas de momento las partes implicadas en las conversaciones deberían tener tiempo para resolver este y otros asuntos.
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